Las linternas son imprescindibles en inmersiones nocturnas, cuevas o pecios, o para observar bien los colores, y realizar fotografías.
Existen múltiples modelos y precios que se suelen diferenciar por la potencia, la forma del foco, y la naturaleza de la fuente energética.
Las linternas más comunes se emplean el iluminar zonas oscuras o en inmersiones nocturnas. Así mismo facilita la localización entre buceadores, o con el barco.
La caja de las linternas debe ser robusta y resistente, con una junta de estanqueidad de gran diámetro.
Debe ser cómoda de llevar en la mano, con un interruptor que se pueda accionar con un solo dedo. Se suele perder con facilidad por lo que a veces va bien llevar un acollador de muñeca que la sujete.
Normalmente el rendimiento y la duración de las pilas están compensados. Algunos modelos dan mucha luz durante un corto periodo de tiempo, pero suelen ser más prácticos los modelos de bajo rendimiento.
Si la linterna dispone de mucho espacio entre el reflector y el cristal, puede que flote y sea incómoda de manejar.
Existen modelos que no se pueden inclinar, por lo que no se puede ilumina hacia abajo o arriba.
Se debe lavar con agua dulce después de cada inmersión.
Cuando no se use, es mejor retirar la pilas, y si es recargable no dejar que la batería se descargue completamente, recargándola cada 2-3 meses.
Se deben observar que los contactos y las juntas estén en perfecto estado.