Es una de las funciones más importantes del chaleco compensador. Gracias a ella se puede llegara obtener un peso aparentemente nulo debajo del agua.
La flotación neutra es algo necesario para un buceo cómodo y seguro, además de que así se evita destrozar formaciones coralinas con las aletas.
Para aprender a hacerlo se suele contar con el control de un inspector, empezando por profundidades pequeñas y bajando según aumente el control.
Se consigue soltando y añadiendo pequeñas cantidades de aire al jacket, hasta que se está estable a la profundidad deseada.
Si se ha obtenido un punto neutro, durante el resto de la inmersión será fácil mantenerlo, siempre que la profundidad sea estable, controlándolo con los pulmones, sin tener que introducir aire en el chaleco.
En el caso de que se quieran ascender unos centímetros, bastará con respirar un poco más profundamente, teniendo cuidado de no mantener la respiración más de dos segundos, ya que se ascenderá más de medio metro y puede provocar embolismo.
Es conveniente practicar con los pulmones, ya que se debe controlar la flotación solo con ellos, sin tener que estar constantemente introduciendo y sacando aire del chaleco. Una vez dominado, se podrá flotar a cualquier profundidad sin esfuerzo.
Al llegar abajo, el buceador se colocará cara abajo y en posición horizontal, empezando a llenar el chaleco de aire poco a poco, ya sea oral o automáticamente. Cada vez que se infle el chaleco, respirar y mantener la respiración durante un par de segundos, para que la parte superior del cuerpo se eleve. Si se asciende muy rápido es que hay demasiado aire en el chaleco y se tiene que purgar. Si se suelta aire de los pulmones la parte superior del cuerpo descenderá. Si el descenso es brusco se introducirá más aire en el chaleco, repitiendo la operación, hasta que el cuerpo ascienda y descienda lentamente al respirar. En todo momento las puntas de las aletas tienen que estar en contacto con el fondo todo el rato.