Al ser el equipo tan pesado y aparatoso, es complicado para el buceador inexperto saber como saltar al agua desde la embarcación para empezar la inmersión. El aprendizaje se suele realizar en dos pasos: primero sin escafandra, y después con todo el equipo. Para ello es indispensable conocer las técnicas de vaciado de la máscara. Existen muchas maneras para adentrarse en el agua, y se debe elegir la más conveniente según el barco, el lugar de salida, el estado del mar…
Sea cual sea el método elegido se deben saber ciertos aspectos básicos de seguridad. En la superficie se debe comprobar que se dispone de todo lo necesarios y que se encuentra en perfecto estado. En el momento de saltar la grifería debe estar abierta, y se debe comprobar el lugar al que se caerá. Durante el salto se tiene que mantener la máscara sujeta contra la cara con la mano. Con la otra se puede sujetar la parte inferior del chaleco, para evitar posibles choques con el equipo. Una vez que se está en el agua es mejor retirarse de la zona de entrada, para dejar paso a otros buceadores.
Suele estar ubicada en la parte trasera del barco o por los laterales. Su principal función es permitir la subida de los buceadores, peor también sirve para descender, siendo el método menos estresante para los principiantes. Si el mar está agitado no es recomendable usarla ya que los riesgos de choque debido a la fuerza de las olas son elevados.
Es conveniente saber que estas escaleras no están adaptadas para las aletas, por lo que se debe pisar el escalón con la parte donde se encuntre la planta del pie.
Se desciende de espaldas al agua, con las manos agarradas a la barandilla de la escalera, y moviendo un pie por escalón. Se debe soltar la escalera cuando el agua llegue al nivel del cuello.
Consiste en dar desde el borde del barco, el muelle… un paso hacia delante, dejándose al vacío. Los pies deben estar juntos en la posición inicial, con las aletas sobresaliendo levemente por el borde. La mirada va al horizonte, y con las manos se sujeta la mascara a la cara, y la escafandra. Después se da un paso hacia delante con una de las piernas, siguiendo la otra inmediatamente. La entrada en el agua se realiza con las pernas juntas, y con los pies siguiendo la línea de las piernas para evitar que la aleta palmee en la superficie.
Si hay mucho oleaje, se efectúa el salto recto con giro para proteger la cara de las olas con la espalda. El giro se efectúa en el aire, para evitar entrar en el agua de forma desequilibrada.
Se debe espera a la cima de la ola para saltar.
Especial para salidas desde barcas neumáticas, estabilidad débil o baja altura.
El buceador se sienta con la espalda hacia el agua, con la botella y glúteos fuera de la barca con las piernas y las rodillas dobladas juntas. La máscara se sujetará con una mano, la barbilla de apretará contra el pecho, dejándose caer hacia atrás.
Si se quiere dejar más espacio entre el barco y el lugar de caida, es conveniente lanzar las piernas hacia el cielo.
Se lanza la escafandra al agua con el chaleco inflado para que no se hunda. A continuación se salta rápidamente al agua, y se suelta el chaleco. Se coloca la boquilla en la boca, y se viste el chaleco. Después se debe desinflar el chaleco para descender y emprezar la inmersión, siendo recomendable una purga lenta para realizar un descenso lento y equilibrado.